Sangre y tierra: Resistencia indígena del Norte del Cauca, de Ariel Arango Prada

Este mediometraje de 43 minutos retrata la resistencia y movilización del pueblo indígena nasa en el norte del Cauca, donde viven más de 160.000 representantes de los pueblos originario, entre 2015 y 2016.

La reivindicación de su cultura ancestral, la defensa de su autonomía, la lucha por la recuperación de sus tierras sagradas, la denuncia de los efectos de la megaminería y su participación en el proceso de paz (han sido muchas veces víctimas directas de la violencia de militares, paramilitares, narcotraficantes y guerrilleros, o castigados con los desplazamientos forzados) forman parte del abanico de problemáticas que aborda este documental didáctico y militante. El film presenta testimonios, asambleas y actividades varias de integrantes del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), una de las organizaciones pioneras (comenzó a funcionar en 1971) en la defensa de los derechos y la dignidad de los pueblos originarios de la región con postulados que resumen sus intenciones: Unidad, Tierra, Cultura y Autonomía. Con una imagen y un montaje muy cuidados, Sangre y tierra… expone la falta de respuesta del gobierno (o el incumplimiento de promesas incluso firmadas en diferentes acuerdos), la persecución judicial a muchos de sus líderes y las masivas marchas y piquetes por todo el país. Una película urgente, reciente y contundente a la hora de mostrar heridas todavía abiertas en la sociedad colombiana. Por Diego Batlle, de OtrosCines.com, para Retina Latina